Byung Chul Han: “La emergencia viral y el mundo del mañana”
Byung Chul Han es un ensayista y filósofo coreano que se ha destacado en los últimos años por su agudo análisis al modelo neoliberal actual y cómo este repercute en la mentalidad de las personas. Al respecto postula que ya no nos encontramos en una sociedad disciplinada y reprimida por mandatos externos, si no que es el individuo quien se explota a sí mismo bajo una falsa ilusión de libertad. Esto es debido al axioma imperante en nuestra sociedad: “Yo puedo”, que a diferencia del “yo debo”, no tiene límites.
Tal transición se relaciona con un cambio en los sistemas de producción y acumulación económica, los cuales asumen nuevas formas incorpóreas, como la publicidad y las redes sociales, que necesitan, por lo tanto, nuevos mecanismos de control. Es en este sentido que aparece el concepto de psicopolítica, el cual surge en respuesta a la biopolítica propuesta por Foucault, y es en esta que el control social ya no es ejercido hacia los cuerpos (tangibles) sino que hacia la mente (incorpórea).
Ambos conceptos son muy necesarios de considerar a la hora de leer su artículo publicado en El País acerca de la emergencia del coronavirus. En este se refiere a la diferencia en el manejo del virus entre el continente asiático y el resto del mundo, en donde en el primero existen gobiernos autoritarios con un fuerte régimen de control digital, lo cual propició un mejor manejo de la propagación de la pandemia. En tales regímenes el nivel de control sobre la población trasciende todos los límites de lo que la esfera privada significa, teniendo el Estado el conocimiento y vigilancia sobre dónde está, con quién está, qué opina y qué consume cada individuo en todo momento. Han se refiere a este manejo como: “Una biopolítica digital que acompaña a la psicopolítica digital que controla activamente a las personas”. Lo relevante está en que, como asevera Naomi Klein, los estados de conmoción mundial son propicios para la implementación de nuevos sistemas de gobierno. Es por tanto que la irrupción de este virus podría ser el momento preciso para imponer este control bio y psico-político sobre occidente.
Es un geógrafo académico británico de orientación marxista. Este ha sido reconocido por su acucioso análisis al modelo neoliberal y cómo este ha ido transformando los estados occidentales, tomando a Chile como un importante ejemplo dentro de su revisión histórica. Dentro de las múltiples aproximaciones al neoliberalismo, la de Harvey se caracteriza por definirlo como una teoría de la práctica económica que se basa en el concepto de libertad individual y que surgió como un proyecto político de la clase capitalista dominante.
Este análisis del neoliberalismo se hace especialmente relevante a la hora de pensar en el fenómeno del coronavirus, ya que la que pareciera ser la proposición central de Harvey en este artículo es que las consecuencias de la pandemia dependerán justamente de las grietas y falencias del modelo antes mencionado. Entre ellas aparece la globalización, las carencias en los servicios públicos (en especial los de salud), y la incapacidad para imponer políticas restrictivas al total de la población, ya que se ejercen desde estados en donde lo que prima es el mercado y las libertades individuales.
Una de las grietas más dignas de analizar es la del consumismo desenfrenado que venía consolidándose como motor de la economía durante las últimas décadas. Este se caracteriza por extremar al máximo el turismo internacional (mediante aeropuertos, restaurantes, bares) junto con un consumismo de actividades, como festivales culturales, campeonatos y más. Son precisamente estos espacios y servicios los que hoy se encuentran en crisis, ya que resultan inservibles y hasta peligrosos en las actuales condiciones. Con todo esto en vista, el artículo de Harvey pareciera ser una crónica de la muerte anunciada del neoliberalismo en manos del virus y nos invita a observar una a una la existencia y ocaso de las características que lo componen.
Jorge Riechmann: “La crisis del coronavirus y nuestros tres niveles de negacionismo.”
Es un poeta y sociólogo español distinguido por sus perspicaces ensayos dentro del ámbito de la ética medioambiental, ecología política y ecosocialismo. Este ha analizado cómo el modelo capitalista está llevando al planeta y la humanidad al abismo mediante una insaciable cultura productiva y un consumismo y extractivismo desenfrenados. Dentro de los causantes de dicha situación considera el afán humano de actuar como si la Tierra tuviera recursos infinitos y fuera inmutable a la contaminación que le transmitimos, junto con una tendencia de este de creerse exento y superior a las leyes de la naturaleza. Frente a tal situación de catástrofe Riechmann plantea como única solución destruir radicalmente el capitalismo salvaje en el que estamos inmersos.
De acuerdo a estas concepciones es que el poeta se ha manifestado estos últimos meses sobre la crisis del coronavirus, afirmando que considerando la intervención humana en el planeta durante los últimos años (sobre todo en el sector ganadero y la polución del aire) era cosa de tiempo para que se propagara una pandemia como la actual.
Aun así, en el artículo mencionado se refiere al coronavirus como un fenómeno que ha venido a revelarnos el negacionismo en el que nos encontrábamos. Al respecto, postula que este negacionismo se expresa en tres niveles, el primero sería el climático, en donde renegamos que somos ecodependientes e interdependientes dentro de una biósfera interconectada. Luego se refiere a la negación de nuestra corporalidad, vulnerabilidad y mortalidad frente a lo implacable que es la naturaleza y sus procesos. Y en el último nivel se manifiesta contra el cansino e inútil esfuerzo de querer resolver la crisis dentro de la misma dinámica capitalista, que es la gran responsable de esta. Considerando lo anterior, es que este artículo aparece como una invitación a concebir el virus que azota el mundo, también como una posibilidad de abrir los ojos y dar un giro frente al abismo al que como humanidad nos aproximamos.